Instaladores ven muy justo el plazo de tres meses para adaptar las antenas colectivas de la TDT
La Asociación de Gremios de Instaladores de Catalunya (Agic) ven «muy justo» el plazo hasta el 1 de enero de 2015 para adaptar las instalaciones de antena colectiva de la Televisión Digital Terrestre (TDT) en los edificios que tiene que realizar parte de la población en el proceso de liberación del dividendo digital.
Esta adaptación viene motivada por el mandato europeo de liberar la banda de 800MHz utilizada por la TDT para desplegar las nuevas redes de telefonía de muy alta velocidad (4G) y extender su cobertura a todo el territorio.
El jefe de la Comisión de Telecomunicaciones de la Agic, Enric Fraile, ha explicado en una entrevista a la agencia Europa Press que las adaptaciones serán necesarias en aproximadamente un millón de edificios en España –una parte importante en Catalunya–, y que tendrán un coste aproximado de unos 350 euros por comunidad de vecinos.
Ha afirmado que esa modificación en las antenas colectivas tiene que incluir realizar una reubicación de las frecuencias de las cadenas televisivas y resintonizarlas, ya que el 1 de enero desaparecerán de su frecuencia actual.
Ha explicado que solo entre octubre y diciembre emitirán simultáneamente en ambas frecuencias, aunque técnicamente sería posible continuar haciéndolo, y ha afirmado que es una adaptación que se tendría que haber hecho hace dos años y se ha ido demorando.
Fraile ha advertido de que esa instalación la tienen que realizar empresas acreditadas y de forma adecuada pensando en el 4G, y que la premura en el tiempo puede hacer que se «incremente el intrusismo» ofreciendo instalaciones a un precio más bajo.
Por ello, ha recordado a las comunidades de vecinos que pidan un boletín de instalación a los instaladores por que sin él es «como si no estuviera instalada» en el caso de cualquier reclamación.
Ha afirmado que ve muy justo el plazo para la instalación de antenas, atendiendo al número de empresas acreditadas en Catalunya –1.500– para ello, a que los instaladores «no pararán el día a día» con otras cuestiones, que en algunas instalaciones será necesario volver o la posibilidad de que los fabricantes no puedan producir los módulos suficientes para las antenas.
Sobre el plan de ayudas del Gobierno central para la adaptación de las antenas, cifrado en unos 290 millones de euros, ha lamentado que el Gobierno central todavía no haya definido cómo acceder a ellas.