España no podrá adelantar al 1 de enero de 2014 el reparto de frecuencias de la TDT
El Gobierno español no va a ser capaz de cumplir con su compromiso de adelantar al 1 de enero de 2014 el reparto de las frecuencias que tienen que desocupar las cadenas de TDT entre los operadores de telefonía y por las que éstos ya pagaron 1.800 millones.
La cuarta generación 4G de telefonía móvil no arrancará en España comercialmente posiblemente hasta finales de 2014 o, más probablemente o 2015, debido a que el Ministerio de Industria tiene muy difícil cumplir su compromiso de adelantar en un año la entrega de frecuencias, según fuentes del sector. De hecho, en el texto del plan de la Agenda Digital aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 15 de febrero, el Ministerio de Industria ha eliminado la cláusula por la que el Gobierno se comprometía a poner a disposición de los operadores el 1 de enero de 2014 las frecuencias de la banda de 800 MHz que dejaban libres las televisiones, el llamado dividendo digital, y sobre la que operará el LTE.
La causa es que Industria sigue sin resolver el dilema que ha supuesto la sentencia del Tribunal Supremo del pasado mes diciembre en la que declaraba nulo el acuerdo del 16 de julio de 2010 del Consejo de Ministros por el que se entregó un múltiple completo, con capacidad para emitir cuatro canales convencionales, a Antena 3, Telecinco, Sogecable, Veo7, Net Televisión y La Sexta al haberse realizado «sin la realización de concurso público».
Las operadoras, que pagaron 1.650 millones por la subasta de frecuencias realizada en 2011, se ven involucradas indirectamente por este fallo judicial, puesto que hasta no desocupen las cadenas de TV las frecuencias, las operadoras de telefonía no pueden implementar un plan para ocupar las mismas. El conflicto se ha enquistado porque las cadenas de TV que resultaron adjudicatarias no quieren ni oír a hablar de un nuevo reparto, que les supondría perder hasta nueve canales. El periodo para migrar a otras frecuencias puede durar hasta un año, con lo que el retraso acumulado puede ser mayúsculo.
Las compañías de telefonía móvil ya han mostrado su preocupación al Ministerio, que les ha asegurado que, en ningún caso, se iba a repetir la subasta celebrada en julio de 2011. Se busca una interpretación de la sentencia del Supremo que haga posible no aplicarla con carácter retroactivo, pero hay serias dudas jurídicas de que eso sea posible.
Mientras se resuelve el asunto legal, el LTE será en España poco más que un proyecto piloto, aunque las operadoras están aprovechando la banda de 2,6 Ghz para sus despliegues precomerciales en grandes ciudades, aunque la banda idónea para tener cobertura en edificios e interiores es la de 800 Mhz.
El País